A casi 500 pasajeros a bordo del crucero Diamond Princess, donde se está propagando el nuevo coronavirus, se les permitió desembarcar hoy (19 de febrero) después de que las autoridades declararon que esos pasajeros habían completado con éxito una cuarentena de dos semanas.
Sin embargo, a algunos expertos les preocupa que esta cuarentena no haya sido efectiva y que los pasajeros liberados no estén libres del virus, según informes de prensa.
El asediado barco ha estado en cuarentena y atracado en Yokohama, Japón, desde el 3 de febrero, con unos 3.700 pasajeros y tripulantes a bordo. Pero durante ese tiempo, 621 pasajeros se infectaron con el nuevo coronavirus, lo que generó la preocupación de que las medidas para prevenir la propagación del virus en el barco no fueran adecuadas.
Todo sobre COVID-19
-Ver actualizaciones en vivo sobre el nuevo coronavirus
-¿Qué tan mortal es COVID-19?
-¿Cómo se compara el nuevo coronavirus con la gripe?
-¿Por qué 'faltan' los niños del brote de coronavirus?
De hecho, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los EE. UU. (CDC) anunciaron el martes (18 de febrero) que no se les permitirá a todos los pasajeros y la tripulación que aún están en el barco regresar a los EE. UU. Durante al menos 14 días después de abandonar el barco. (El CDC ya ha evacuado a varios cientos de pasajeros estadounidenses del barco, y esos pasajeros están actualmente en cuarentena en las bases militares de los EE. UU.)
"Si bien la cuarentena potencialmente confirió un beneficio significativo para la salud pública al desacelerar la transmisión, la evaluación de los CDC es que puede no haber sido suficiente para prevenir la transmisión entre las personas en el barco", dijo la agencia en un comunicado. "Los CDC creen que la tasa de nuevas infecciones a bordo ... representa un riesgo continuo".
Además, un especialista japonés en enfermedades infecciosas que visitó el barco informó que las medidas para controlar la propagación viral a bordo eran "completamente caóticas", según The New York Times. Con respecto a los pasajeros que salen del barco hoy, "no me sorprendería si transmitieran infecciones", dijo al Times el especialista, Dr. Kentaro Iwata, de la Universidad de Kobe.
Sin embargo, los funcionarios japoneses dijeron que "hicieron la máxima consideración para garantizar la salud de los pasajeros y la tripulación", informó el Times.
Aún así, el ministro de salud de Japón, Katsunobu Kato, instó a los pasajeros a abandonar el barco para limitar sus salidas públicas y controlar su salud en los días siguientes, según el Times.
Se espera que más pasajeros abandonen el barco en los próximos días.