Completo con tentáculos, un agujero negro supermasivo y gas emisor de rayos X, el telescopio espacial Hubble de la NASA ha encontrado un monstruo de una galaxia, y está ayudando a los astrónomos a resolver un rompecabezas de larga data. Pero cómo las estructuras delicadas como las que se encuentran en esta galaxia pueden soportar el ambiente hostil y de alta energía ha sido un misterio. Pero los investigadores dicen que la belleza y la bestia coexisten y dependen unas de otras para sobrevivir.
Una de las galaxias elípticas gigantes más cercanas, NGC 1275 alberga un agujero negro supermasivo. La actividad energética del gas que se arremolina cerca del agujero negro sopla burbujas de material en el cúmulo de galaxias circundante. Los largos filamentos gaseosos se extienden más allá de la galaxia, hacia el multimillonario gas de emisión de rayos X que llena el cúmulo. Los astrónomos pensaron que estos delicados filamentos ya deberían haberse calentado, dispersado y evaporado, o colapsado bajo su propia gravedad para formar estrellas.
Estos filamentos son la única manifestación de luz visible de la intrincada relación entre el agujero negro central y el gas de racimo circundante. Proporcionan pistas importantes sobre cómo los agujeros negros gigantes afectan su entorno circundante.
Utilizando la visión de Hubble, un equipo de astrónomos dirigido por Andy Fabian de la Universidad de Cambridge, Reino Unido, resolvió por primera vez hilos individuales de gas que forman los filamentos. La cantidad de gas contenido en un hilo típico es alrededor de un millón de veces la masa de nuestro propio Sol. Solo tienen 200 años luz de ancho, a menudo son muy rectos y se extienden hasta 20,000 años luz. Los filamentos se forman cuando el gas frío del núcleo de la galaxia se arrastra a raíz de las burbujas ascendentes que sopla el agujero negro.
Un nuevo estudio publicado en la revista Nature del 21 de agosto propone que los campos magnéticos mantienen el gas cargado en su lugar y resisten las fuerzas que distorsionarían los filamentos. Esta estructura esquelética es lo suficientemente fuerte como para resistir el colapso gravitacional.
"Podemos ver que los campos magnéticos son cruciales para estos filamentos complejos, tanto para su supervivencia como para su integridad", dijo Fabian.
Redes similares de filamentos se encuentran alrededor de otras galaxias de cúmulos centrales más remotas. Sin embargo, no pueden observarse con una resolución comparable a la vista de NGC 1275. En futuras observaciones, el equipo aplicará la comprensión de NGC 1275 para interpretar lo que ven en otras galaxias más distantes.
Fuente de noticias: Sitio de Hubble